El turismo es una de las actividades humanas con mayor impacto social, económico y cultural en el mundo actual. Viajar nos brinda la oportunidad de conocer nuevas realidades, descubrir otros modos de vida y contribuir al entendimiento entre personas y culturas. Sin embargo, esta experiencia debe desarrollarse de forma responsable, respetuosa y sostenible.
El Decálogo del Turista establece una serie de principios fundamentales que promueven un turismo ético, consciente y equilibrado, tanto para los visitantes como para las comunidades receptoras. Estos diez puntos recogen los valores universales que deben guiar el comportamiento de quienes viajan, así como las obligaciones de los agentes del sector turístico, con el fin de asegurar que esta actividad contribuya al desarrollo humano y al bienestar colectivo.